
Después de ocho años alejada de los reflectores musicales, Fergie (50 años) ha sorprendido con un regreso explosivo, reinterpretando su clásico “London Bridge” para la serie de Netflix Too Much, creada por Lena Dunham. Este retorno marca no solo una reaparición artística, sino también una reinterpretación humorística y liberadora de uno de sus mayores éxitos.
El nuevo videoclip, rodado en el emblemático London Bridge —y no en el más famoso Tower Bridge, donde se filmó originalmente en 2006— cuenta con una atmósfera intencionalmente campy. Fergie, acompañada de la actriz Megan Stalter, aparece bailando entre guardias reales y tomando té, en una secuencia divertida que celebra este regreso con estilo desenfadado.
Fergie compartió su entusiasmo por esta reimaginación: “Tenía que ‘arreglar’ el video. Veinte años después, filmamos en el verdadero London Bridge… un lugar un poco más desordenado, pero perfecto para este momento ‘too much’”. Esta vuelta también refleja una nueva etapa en su vida: más relajada, juguetona y menos perfeccionista.
La artista recalcó que esta experiencia la hizo sentirse “un poco más alocada, divertida… disfrutar la vida de otra forma” al ritmo de una canción que la posicionó como figura global hace dos décadas.
El clip, dirigido por Mia Barnes, sirve como sintonía inicial de Too Much, una serie que estrena el 10 de julio en Netflix. En ella, la protagonista, interpretada por Stalter, enfrenta su nueva vida en Londres tras un desamor, enmarcada en un contexto romántico y cómico donde “London Bridge” resuena con más fuerza que nunca.
Este proyecto representa algo más que un regreso: es una reivindicación visual, una prueba de que Fergie aún posee la capacidad de reinventarse con gracia e irreverencia. Quienes la vimos despuntar en los 2000 recordarán su paso por los Black Eyed Peas y su éxito solista con The Dutchess, celebrados por hits como “Glamorous”, “Big Girls Don’t Cry” y, por supuesto, “London Bridge”.
Con esta relectura inesperada de su propio legado, Fergie demuestra que, pasado el tiempo, el arte puede volver con igual fuerza, una dosis de humor y, sobre todo, autenticidad. Su regreso no solo aviva la nostalgia, sino que abre una nueva puerta a su creatividad… ahora acompañado de Netflix.
